Se le llama surrealismo a un movimiento importante de carácter estético y artístico originado en Francia en la primera y segunda década del siglo XX, como resultado del movimiento dadaísta junto a la gran influencia dada por el escritor André Bretón, a quien se le considera fundador y exponente mayor.
El surrealismo fue bastante popular en décadas posteriores en América y en Europa. Tuvo manifestaciones en vertientes plásticas, literarias y cinematográficas. No fue uniforme ni estable porque el movimiento surrealista siempre buscó formas nuevas de arte y de innovación en sus objetos, lenguajes y perspectivas.
Esto conllevó a una gran revolución pictórica, lingüística y narrativa; eliminando las reglas de lo predecible y comprensible. Fueron muy utilizados los recursos artísticos de técnicas azarosas, libres de planificación consciente o automática y anotar el sueño para usarlo posteriormente como inspiración artística.
Características del Surrealismo
Pintura
La pintura surrealista se basó en el automatismo que se practicaba en la lectura surrealista, básicamente entre los años 1923 y 1924, mientras se desarrollaba el apogeo de Bretón. Luego se originó una variante cubista promovida por Pablo Picasso en el año 1929, la cual tuvo mucha oposición porque se entendía que quitaba credibilidad al movimiento surrealista.
Salvador Dalí, junto a otros pintores emprendieron una técnica llamada método paranoico y crítico que consistió en mirar fijamente a una superficie hasta que brotaran siluetas o formas en la mente.
Otras técnicas que se utilizaron fueron la decalcomanía, que consistió en colocar pintura en dos hojas, pegarlas y luego arrancarlas antes de que ambas se sequen para tener formas extrañas. Otra es el frottage, en el cual un lápiz se frota en una hoja colocada encima de un objeto. Otros métodos se ayudaban de la improvisación, el azar y el imprevisto.
Literatura
El surrealismo se origina como una tendencia literaria que recogía las experiencias junto al sinsentido característico de la poesía dada, su máxima era similar a la expresión lingüística del vacío y a la destrucción del lenguaje ordenado.
Se entiende que el dadaísmo corresponde a ser un hermano nihilista del surrealismo, aunque este eligió una variante más romántica considerando a la obra literaria como la interioridad privada del poeta.
El cadáver exquisito era una de las técnicas literarias usadas por los surrealistas en el cual el poema se componía en trozos redactados por distintos autores. Otra técnica de importancia fue la escritura automática, en la cual el poeta descargaba las palabras secretas de su mente sin mucho esfuerzo en pensarlo. También el teatro del absurdo desarrollaba situaciones ridículas, oníricas e incomprensibles.
Escultura
La escultura en el surrealismo usó formas ambiguas, no completamente abstractas pero que solían asemejarse a lo simple y a veces a lo infantil. Con recursos como la cerámica y materiales metálicos, entre otros.
Cine
El cine surrealista utilizó las distintas ventajas del medio audiovisual para servir a la reproducción de los sueños. La estética se desarrolló con relatos oníricos llenos de absurdidad, símbolos y repeticiones acompañándose de distintos tipos de aproximaciones audiovisuales que tenían un contenido narrativo menor, en ocasiones haciendo experimentos geométricos.
Temáticas principales
El surrealismo no estuvo ceñido a una serie de temas determinados porque su exploración se dirigía a conseguir liberar la mente humana, similar a lo que se experimenta en el trance o en el sueño. Por esta razón, las obras surrealistas apuntaban a lo incomprensible, absurdo, onírico o misterioso.
Esto significa que sus obras se representan por paisajes incomprensibles, representaciones fantásticas, siniestras, de pesadillas o figuras contradictorias. Los temas predilectos se tomaban de los relatos míticos o religiosos, del imaginario tradicional y de la vida cotidiana. Su fuente de inspiración principal solían ser las alucinaciones o los sueños del mismo artista.
Importancia del Surrealismo
El surrealismo fue una escuela estética y artística de enorme trascendencia e importancia en las Américas y en Europa. Occidente había ido tras el sueño cartesiano y racionalista del positivismo, es decir, valorar la razón humana como el único instrumento de la civilización.
El siglo XX rompió con esa idea haciendo uso del surrealismo para quebrarla desde el arte. La estética se utilizó por distintas tendencias sociales y políticas, cuya interpretación era un gesto artístico a la liberación con la cual los silenciados podían hablar, dando lugar a las cosas reprimidas o secretas que únicamente aparecían en sueños.