El período entreguerras, también llamado interbellum, se conoce como el período histórico ocurrido en el siglo XX que va desde el año 1918 hasta el 1939. De manera cronológica se establece a partir del 11 de noviembre de 1918 al finalizar la Primera Guerra Mundial y el 1 de septiembre de 1939 al iniciar la Segunda Guerra Mundial.
Aunque el período tuvo una corta duración, fue una época de muchos cambios alrededor del mundo. La producción de energía que se basó en la mecanización asociada y en el petróleo se expandieron en gran manera dando paso a unos alocados años veinte, un período de crecimiento y prosperidad económica en la clase media de Europa, Norteamérica, Asia y diversas partes del planeta.
El alumbrado eléctrico, los carros, las emisiones de radio, etcétera, se hicieron normales en la población de ese entonces que se veía desarrollada. Las indulgencias de aquella época antecedieron a la Gran Depresión, la cual se define como una recesión económica alrededor del mundo, que en ese entonces no tenía precedentes, y produjo un grave daño a la mayoría de las grandes economías mundiales.
Características del Período Entreguerras
Periodización Histórica del Período entreguerras
La historiografía occidental tiende a dividir la periodización histórica de este período en diferentes etapas, las cuales son:
- Entre 1919 a 1924, la recuperación después de los conflictos bélicos.
- Entre 1925 a 1929, el auge de la economía.
- El crack ocurrido 1929 junto a la siguiente Gran Depresión, hasta llegar al 1933 y 1936.
- La toma de poder de los regímenes autoritarios y de los fascismos, haciendo hincapié en la Italia fascista del 1923 y en la Alemania nazi del 1933.
Del 1936 al 1939, la Guerra Civil en España y posteriormente el origen de la Segunda Guerra Mundial. Este último suceso se acompañó de acontecimientos de importancia tales como: en 1931 la invasión de Japón a Manchuria, en 1936 la remilitarización de Renania y la invasión de Italia a Etiopía, en 1937 la invasión de Japón a China y por último en 1938 la crisis de los Sudetes y la anexión alemana de Austria.
Períodos entreguerras en distintas regiones del mundo
España
El periodo se caracterizó en 1923 por la instauración de la dictadura de Primo de Rivera y la crisis ocurrida en la monarquía de Alfonso XIII, esto sufrió la indiferencia de muchas pobladores mientras que algunos sectores como el ejército y la burguesía catalana lo apoyaron.
El éxito obtenido en la Guerra del Rif fue importante a mitad de los 1920, pero con el descrédito a la Dictadura y la crisis económica del 1929 todo fue un fracaso a inicios del 1930. Esto también trajo como consecuencia la caída de la institución monárquica, algo que fue notable en las elecciones municipales realizadas en 1931 y en la proclamación espontánea de la Segunda República Española.
Europa
La reciente configuración mundial luego de finalizar la Primera Guerra Mundial fue originada por las potencias aliadas en el 1919 mientras se realizaba la Conferencia de Paz de París, marcando el inicio de esta época.
Pero la finalización de la guerra no fue sinónimo de paz o estabilidad. En Europa el clima social y político se agitó de inmediato por situaciones como la Revolución Húngara ocurrida en 1919, la revolución en Alemania en noviembre del 1918 y la guerra de independencia de Turquía desde 1919 hasta 1923.
América
En este continente el período entreguerras se caracterizó también por la bonanza económica ocurrida en la década del 1920, pero el crack sucedido en 1929 condujo a una crisis y al estancamiento de las economías de ese lugar, especialmente las exportaciones realizadas desde los países de Sudamérica hacia Europa y Estados Unidos.
Los Estados Unidos intervinieron en La Gran Guerra dando el toque decisivo y retornaron al aislacionismo. La política exterior anteriormente ejercida por Woodrow Wilson fracasó en el momento en el cual el Congreso de ese país votó en contra de adherirse a la Sociedad de Naciones.
La política internacional realizó únicamente intervenciones militares esporádicas en los estados del Caribe que manejaban a su antojo, a esto también se le llamó Guerras Bananeras. Aún así, Estados Unidos fue el líder indiscutible de desarrollo económico en esa época.