Un fluido es una sustancia específica que presenta distintas fuerzas de atracciones débiles entre sus partículas. Si nos vamos al área de la física, un fluido cuenta como una sustancia que no mantiene su forma, por lo que fluye si se le aplica tensión tangencial, por más pequeña que sea la fuerza de tensión.
Según la química, un fluido es aquella cantidad de partículas unidas entre sí por diferentes fuerzas cohesivas débiles y las paredes de un recipiente que les mantengan en un mismo sitio. Sea cual sea la definición que usemos, un fluido suele ser líquido, no tiene forma y se mueve en todas direcciones si se le aplica movimiento o fuerza.
Características de los Fluidos
Características principales
Los fluidos no pueden mantener su forma.- Se adaptan a la forma del recipiente en donde se encuentran contenidos.
- Tienen una superficie libre completamente plana, principalmente en reposo, y cuando tienen una presión constante sobre ellos.
- Fluyen libremente en pendientes y espacios no contenidos.
- Su volumen depende del recipiente donde se encuentran.
- Sus átomos y moléculas no se encuentran unidas entre sí, como en el caso de los sólidos.
- Se pueden mezclar con facilidad con otros fluidos.
Densidad
Todos los fluidos cuentan con densidad, la cual corresponde a la magnitud escalar en proporción a la cantidad de masa tomando en cuenta el volumen de una sustancia o de un objeto.
La densidad de un fluido puede verse afectada por diferentes elementos, como por ejemplo, la temperatura del ambiente.
Volumen específico
El volumen específico corresponde al volumen que ocupa la unidad de masa de un material en especial. Se trata del inverso de la densidad, es por ello que ella no depende directamente de la cantidad de materia que tenga el fluido.
Los fluidos tienen volumen específico y dos fluidos pueden llegar a ocupar la misma cantidad de espacio, aunque ellos no tengan el mismo peso ni sean del mismo material.
Peso específico
Cuando hablamos del peso específico nos referimos a la relación existente entre el peso de una sustancia, en este caso un fluido, y el volumen dela misma.
Como todo fluido tiene un peso como tal y un volumen ocupado dentro del espacio, también cuenta con la propiedad de tener un peso específico.
Viscosidad
- Se trata de la medida de resistencia a las deformaciones que ocurren de forma gradual ocasionadas por tensión por tracción o por tensión cortante. Todo fluido tiene una viscosidad diferente, por ejemplo, la miel tiene una viscosidad diferente a la del agua.
- Podemos jugar con la viscosidad de los fluidos añadiendo componentes. Es así que aumenta la viscosidad del agua si añades componentes como harinas o si la mezclas con otros fluidos.
Comprensibilidad
La comprensibilidad corresponde a un cambio relativo dentro del volumen de un fluido cuando se le añade presión al mismo. Esto quiere decir, que si tienes un recipiente con un fluido (agua, por ejemplo), y lo tapas y agregas presión, el volumen del fluido cambiará compactándose.
Podrá parecer que hay menor cantidad de fluido, pero no es así, sus moléculas se acercan un poco más.
Tensión superficial
La tensión superficial de un fluido corresponde a la cantidad de energía que necesitamos para incrementar la superficie por unidad de área. En palabras más sencillas, sería aquella propiedad que tienen los fluidos de hacer parecer que están cubiertos por una delgada membrana elástica.
Entonces la tensión superficial sería la fuerza o energía que necesitamos para “romper” esa delgada membrana elástica. Los fluidos presentan una resistencia al aumentar su superficie. Esto termina haciendo un efecto que permite que ciertos elementos floten sobre dicho fluido sin hundirse en él.