El Racionalismo es un movimiento filosófico surgido en Europa durante los siglos XVII y XVIII. Afirma que el único fundamento del conocimiento es la razón; defiende la intuición intelectual y el alegado de la concepción de ideas innatas.
Contrario a lo que dice el Racionalismo, el empirismo, expresa que el fundamento del conocimiento es la experiencia y la sensibilidad. El conocimiento verdadero no está basado en las experiencias, según afirma el Racionalismo, ya que estas están sujetas a los sentidos y estos mismos pueden ser engañosos.
René Descartes, Baruch Spinoza y Gottfried Leibniz fueron los mayores representantes del Racionalismo. Descartes fue el fundador de este movimiento filosófico, luego de cuestionar los procedimientos para producir conocimientos en esa época, los cuales estaban basados en las enseñanzas de la Biblia, la filosofía medieval y la filosofía griega.
El término “Racionalismo” es usado principalmente para referirse a un movimiento filosófico surgido en la Edad Media, sin embargo, hoy día su significado abarca a cualquier filosofía cuyo principal fundamento del conocimiento sea la razón, por encima de la fe, las supersticiones, lo irracional, la vida y los conocimientos empíricos.
Características del Racionalismo
El fundamento del conocimiento es la razón
Para el Racionalismo el principio y pilar de todo conocimiento es la razón. Afirma también que los pensamientos son construidos en base a la deducción y la intuición. La verdad concebida por la razón será discernida de manera clara y evidente.
Expresa, además, que la realidad solo es conocida a través de la razón y que esta realidad al ser racional puede ser explicada por las leyes universales. Por otra parte, plantea que una sociedad se desarrollará al utilizar métodos de búsqueda de la razón y la verdad.
El Racionalismo dice que el mundo es racional, organizado y lógico, por tanto, solamente puede ser analizado y discernido por medio de la razón.
El verdadero conocimiento surge de ideas innatas
Este movimiento filosófico se fundamenta en que las ideas innatas son las que le dan paso al verdadero conocimiento, por tanto, la razón surge no como algo aprendido sino de ideas presentes en el interior del pensamiento humano desde su origen. Para el Racionalismo las experiencias solo intervienen para conocer la verdad que ya había descubierto el intelecto humano.
Alguna de las ideas innatas más importantes son la causalidad y la sustancia, ya que como decía Aristóteles acerca de que la respuesta acerca del ser esta en la sustancia, puesto que lo que es, es primero sustancia.
Se duda de todo conocimiento dado por verdadero
El procedimiento utilizado por Descartes en el Racionalismo se basa en el escepticismo racional para obtener un conocimiento verdadero y fuera de toda duda, se apoya en la idea de dudar de todo lo que es considerado verdadero, puesto que, los datos obtenidos por los sentidos son engañosos.
La duda que plantea Descartes es metódica, esto es, para alcanzar la verdad en el conocimiento se necesita un método, además, es universal porque es empleado en todo conocimiento y es hiperbólica porque se es escéptico de todo, por tanto, se lleva a los extremos.
Fascinación por las matemáticas
A causa de la severidad deductiva que posee la matemática, la hace una ciencia idónea para ser empleada en la obtención de conocimientos objetivos, verídicos y certeros, los cuales fundamentan el intelecto del ser humano. Al Descartes utilizar las matemáticas para fundamentar las ideas de esta filosofía, permite que los resultados sean precisos como lo es dicha ciencia.
Descartes utilizó también la geometría para sus investigaciones elementales, dando como resultado cadenas deductivas, por lo tanto, las matemáticas son usadas en esta filosofía para dar argumentos basados en deducciones verdaderas que han sido demostrados.
Demostración de la existencia de Dios
Es sumamente importante dentro de el Racionalismo demostrar la existencia de Dios, puesto que, Dios es el real dictamen de veracidad. Esta filosofía se apoya en argumentos metafísicos, como uno de los escritos por René Descartes llamado “Meditaciones metafísicas en las que se demuestran la existencia de Dios y la inmortalidad del alma”.